Tres testimonios recientes -una madre agotada, una docente especializada y una periodista que investiga el fenómeno- reabren el debate sobre cómo acompañamos a los niños y niñas con altas capacidades en España.
El laberinto de las altas capacidades
El artículo de El País, titulado “Lo siento, mi hijo tiene altas capacidades”, refleja el cansancio de muchas familias que se sienten incomprendidas por un sistema educativo que, con frecuencia, no sabe qué hacer con estos alumnos.
A ello se suma la “sospecha” descrita en el pódcast de Levante-EMV, donde la psicóloga Vanessa Sanchís analiza cómo aún se asocian erróneamente las altas capacidades con elitismo o sobreprotección.
Ambas perspectivas coinciden en un punto: la falta de formación docente específica. La identificación de un alumno con altas capacidades no debería ser el final del proceso, sino el comienzo de una respuesta educativa flexible, emocional y enriquecedora.
Ni genios ni superdotados: niños que también se frustran
En su reportaje para El Confidencial, la periodista Amelia Arenas relata la carga emocional de quienes viven con etiquetas excesivas: “Tener altas capacidades puede ser agotador”.
El texto muestra cómo muchos niños y niñas acaban reprimiendo su curiosidad o bajando su rendimiento para no destacar, especialmente cuando perciben que el entorno los juzga o no los comprende.
Recordemos que, entre los 6 y los 12 años, los niños consolidan su autoconcepto académico y emocional. Según la psicología del desarrollo, el reconocimiento sin acompañamiento puede generar ansiedad y perfeccionismo; de ahí la importancia de combinar la estimulación cognitiva con la educación emocional.
Una mirada educativa necesaria
Las altas capacidades no son solo un tema de rendimiento, sino de ajuste educativo.
Organismos como la UNESCO y el Ministerio de Educación y Formación Profesional recomiendan avanzar hacia un modelo de personalización que equilibre el desarrollo intelectual con el bienestar social y afectivo.
El reto es detectar precozmente las potencialidades, pero también ofrecer entornos emocionalmente seguros, donde el error no se viva como fracaso y la curiosidad se mantenga viva.
Recursos y metodologías complementarias
- Guía de intervención educativa con alumnado de altas capacidades, Consejería de Educación de La Rioja. [PDF].
- Toolkit for Gifted Learners in Inclusive Classrooms, UNESCO.
- Orientaciones educativas. Alumnado con altas capacidades, Eusko Jaurlaritza/Departamento de Educación, País Vasco.
