👉 Fuente: PrevInfad / Asociación Española de Pediatría (AEP)
El Grupo de Prevención en la Infancia (PREVINFAD) reitera la recomendación de la lectura en voz alta por parte de los progenitores desde el inicio de la vida para estimular el desarrollo cerebral y fortalecer el vínculo afectivo.
Estimulación cerebral temprana
Los pediatras señalan que la lectura en voz alta desde edades precoces es fundamental no solo como vía de desarrollo lingüístico e intelectual, sino como un medio de conexión emocional y social.
Escuchar historias desde la infancia estimula e integra determinadas áreas cerebrales, formando una red de conexiones neuronales que finalmente posibilitan la capacidad de leer. Esta estrategia previene problemas del desarrollo y se ha asociado directamente con la alfabetización temprana y la adquisición de un vocabulario más amplio y complejo.
Beneficios más allá del lenguaje
Más allá de la mejora del vocabulario y la comprensión lectora, la lectura en voz alta ofrece beneficios emocionales y cognitivos cruciales:
- Vínculo Afectivo: Crea un espacio íntimo de conexión que fortalece los lazos afectivos, esencial para la seguridad emocional del niño.
- Concentración y Atención: Ayuda a los niños a desarrollar la capacidad de mantener la atención durante periodos más largos.
- Empatía: A través de las historias, los niños exploran diferentes emociones y situaciones, desarrollando la empatía y la comprensión hacia los demás.
- Reducción del estrés: Actúa como una actividad relajante que ayuda a distraer a los niños de preocupaciones y miedos.
Análisis pedagógico y el rol familiar
La Pedagogía del Lenguaje subraya que la exposición a un lenguaje rico y variado es la base de la competencia comunicativa. La lectura en voz alta modela la pronunciación correcta y la entonación, habilidades clave que los niños internalizan.
El rol del adulto es convertir el momento de la lectura en una actividad de ocio placentera y sin coacción. Esto no solo fomenta el amor por los libros, sino que estimula la imaginación y el pensamiento crítico al permitir que el niño visualice las historias en su mente, apoyado por el tono y la expresividad del lector.
Recursos y metodologías complementarias
