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👉 Fuente: La Sexta
Datos recientes sobre el rendimiento del sistema educativo español muestran una clara tendencia de descenso en comprensión lectora entre estudiantes de 15 años, un reto que impacta también en aprendizaje escolar y futura inserción educativa y laboral.
La tendencia a la baja en lectura y otros aprendizajes
Los datos publicados sobre los resultados del Informe PISA (Programme for International Student Assessment) -el estudio internacional que mide competencias básicas entre jóvenes de 15 años en educación, matemáticas y ciencias-apuntan a una tendencia descendente en España en comprensión lectora a lo largo de la última década. Las cifras del último ciclo disponible (2022) comparadas con el de 2012 muestran que los puntos medios de lectura han caído de forma sostenida en estudiantes españoles.
Aunque España no se sitúa en extremo por debajo de la media de la OCDE, la caída acumulada de puntos refleja un desafío estructural en la educación del país, coincidiendo con retos globales de aprendizaje tras la pandemia y con patrones similares observados en otros países europeos.
Qué significa para las niñas y niños
La comprensión lectora no es solo “leer bien en clase”: es una competencia que está estrechamente relacionada con el éxito escolar general, el pensamiento crítico, la capacidad para resolver problemas y la autonomía en estudios posteriores. Un descenso en este ámbito puede traducirse en:
- Dificultades para comprender textos complejos en otras materias.
- Menor habilidad para analizar información de forma crítica.
- Retos para seguir el ritmo académico esperado en secundaria o bachillerato.
- Impacto indirecto en habilidades sociales y emocionales que dependen de comprensión y expresión.
Las evaluaciones como PISA tienen un componente aplicado a “situaciones de la vida real”, lo que significa que traducen las competencias escolares a escenarios prácticos, como interpretar instrucciones, analizar textos informativos o comunicar ideas con claridad.
Factores que se están discutiendo
Varios expertos y medios educativos señalan que no hay una sola causa para esta tendencia. Entre los factores que se discuten están:
- Impacto educativo de los cierres y cambios por la pandemia.
- La integración de tecnologías en el aula sin un acompañamiento pedagógico adecuado.
- Diferencias regionales en recursos educativos y apoyo escolar.
- Cambios curriculares y metodológicos que pueden estar influyendo en cómo se enseña la lectura profunda.
Aunque estos elementos se discuten a nivel académico y mediático, la lectura sigue siendo una prioridad para las políticas educativas internacionales, ya que está directamente vinculada con la capacidad de los niños y jóvenes para aprender otras materias y para su desarrollo integral.
¿Qué puede hacer una familia?
Frente a esta tendencia descendente en comprensión lectora, pediatras y educadores recomiendan:
- Leer con los niños habitualmente desde edades tempranas.
- Sialogar sobre textos y noticias para practicar interpretación y reflexión.
- Fomentar la lectura variada (no solo libros escolares).
- Apoyar hábitos de estudio estructurados y pausas libres de pantallas para mejorar concentración y enfoque.
Estos hábitos ayudan a fortalecer competencias de lectura que van más allá del aula y que sostienen el rendimiento escolar a lo largo de toda la vida educativa.
