La teoría nos dice que la madre, tras el parto, es capaz de producir la leche necesaria para alimentar a la perfección a su hijo. Sin embargo, no siempre es así o hay otras razones por las que el bebé se queda con hambre durante la lactancia. Es esencial ver qué está ocurriendo y aplicar la solución correspondiente lo antes posible de cara a que el niño no sufra de desnutrición, que los padres no entréis en desesperación, etc.
Determinar por qué el bebé se queda con hambre durante la lactancia
Primero y principal es saber cuál es el motivo por el cual tu hijo sigue hambriento. Sólo así podremos actuar del modo correcto, pues no todas las soluciones son válidas en cualquier caso.
Aquí las opciones son muy claras y no hay lugar a error. Puede ocurrir que:
- Tu hijo come más «de lo que debería» y, por tanto, con una toma «normal», se queda con «hambre durante la lactancia». Sí, hay que ponerlo todo entrecomillado porque es algo realmente relativo.
- El bebé come menos de lo que le corresponde. Pueden pasar dos cosas, produces una leche poco adecuada o el niño tiene problemas a la hora de comer.
EDAD DEL BEBÉ (días) | CANTIDAD DE LECHE (ml) | CANTIDAD DE LECHE (ml) |
0-8 días | A penas unas mamadas (15-30 ml máximo) | +8 tomas |
De 7-8 a 30 días | Entre 60 y 70 ml | De 6 a 8 tomas |
De 30 a 60 días | Entre 120 y 150 ml | 6 o 7 tomas |
De 60 a 120 días | Entre 150 y 180 ml | 5 o 6 tomas |
De 120 a 180 días | Entre 210 a 240 ml | 5 tomas |
De 180 a 360 días | 240 ml por comida | 4 o 5 tomas |
A partir de 360 días | 240 ml por comida | 2 tomas |
El bebé come más de lo habitual
En este caso debes hacer una visita al pediatra. En función del peso y la talla (puede que, simplemente, te haya salido un niño grandote), de la relación entre la cantidad de alimento que corresponde al bebé tomar y la que necesita para sentirse lleno y otros aspectos que él considere, estimará que aumentes los mililitros de ingesta y en qué medida o no.
La negativa no es habitual pues, aunque considere que el niño come demasiado, tratará de reducir las cantidades de manera paulatina para acostumbrarlo a comer menos. Así, al menos en un principio, sí te indicará que le des un poquito más de leche, aunque sea un pelín, para ir «reduciendo». Y lo digo entre comillas porque no vas a ir reduciendo realmente, pues conforme pase ese tiempo «de reducción» el bebé irá necesitando más por lo que, aunque no lo aseguro con certeza matemática, lo que ocurrirá es que mantendrás la cantidad de la toma en lugar de ir ampliándola.
Prescrito por el experto, podrás, siempre teniendo muy en consideración las cantidades:
- Suplementar las tomas de pecho con un poco de leche de fórmula.
- Sustituir algunas tomas de pecho por tomas algo mayores de biberón (desayuno o comida a ser posible).

- Aunque no es totalmente recomendable, es posible que se te indique que des al bebé un poquito de agua para que llene el estómago. Mucho ojo con esto, POR FAVOR, porque puede ser contraproducente. Te dejo aquí una lectura sobre dar agua al bebé que debes conocer sí o sí.
El bebé come menos
Como ya hemos visto, puede ocurrir que haya un problema con la leche o bien que el peque no pueda comer. Va a ser evidente que el niño no está comiendo lo suficiente si moja menos de seis pañales por día.
Problemas con la leche
En este caso, lo habitual es que tu cuerpo no produzca la cantidad de leche que debiera o que, incluso, esta sea de peor calidad y el niño la rechace, de ahí que quede hambriento.
Nuevamente, debes hacer un seguimiento de cuánto está comiendo.
———Tu pecho queda vacío tras una toma pequeña
Es tan sencillo como que deberías producir más. Otros puntos que van a hacer ganar puntos esta teoría es que no te hayan crecido los pechos en el embarazo, que no te subiese la leche al parir o, sencillamente, que cuando exprimes suavemente las mamas esas no segregan leche.
- Estimular la producción de leche es sencillo pero debes seguir, nuevamente, las pautas que te dé un profesional.
- Por un lado hay que trabajar los posibles factores psicológicos que estén afectando a la madre (cansancio, estrés, falta de confianza…).
- También habrá que modificar el momento de lactancia en sí. Deberás repartir bien en el tiempo las tomas, considerar alguna toma nocturna aunque el bebé no la pida, retirar el chupete y las tomas complementarias…
- La estimulación física pasa por el uso del sacaleches, el cambio de mama en cada toma, la correcta posición de ambos, no limitar las tomas a un tiempo específico, dar el pecho con más frecuencia…

———Come poco pero queda leche en la mama
Considera hacerte una prueba de calidad de la leche para comprobar que esta es «buena». Si el bebé tiene hambre y no la ha tomado es porque no le gusta.
Un signo claro de que tu leche no es adecuada es que, dejándola un pequeño tiempo en reposo adquiere muy mal olor.
En función de los resultados se te pedirá que modifiques tu dieta y algunos hábitos. De no ser suficiente sólo te queda la opción de recurrir a la lactancia artificial. Esto es, dejar de dar de mamar y pasar a la leche de fórmula para bebés.
Tanto si produces poca leche como si esta no es del agrado del pequeño, hasta estabilizar la situación, nuevamente, los consejos anteriores sobre complementar y sustituir tomas serán esenciales.
El bebé tiene problemas para comer
Podría ocurrir que la postura del niño, de la mamá o de ambos no sea adecuada. Sería extraño, pues esto es algo bastante intuitivo pero considéralo.

Una vez descartado viene «lo malo», que tu hijo tenga algún problema, seguramente transitorio, que le dificulte la ingesta y por eso se quede con hambre durante la lactancia.
Muy importante indagar al respecto porque, aunque es muy extraño, puede existir alguna malformación en los primeros centímetros del aparato digestivo (boca, garganta, esófago…) o problemas digestivos graves.