👉 Fuente: who.int
Maltrato físico = daño profundo para el cuerpo y la mente de los niños
Qué dice el informe
El castigo corporal hacia los niños desencadena respuestas que van mucho más allá de las lesiones. Efectos psicológicos y fisiológicos como el miedo, la vergüenza, la culpa y el estrés crónico, con un fuerte impacto en desarrollo cerebral, y su consecuente formación de la personalidad forman parte del combo de consecuencias de usar la violencia física.
La Organización Mundial de la Salud, en su informe Corporal punishment of children: the public health impact lo identifica como un factor de riesgo para la salud mental, el rendimiento escolar y la integración social de los niños.
Relación con la pedagogía y la disciplina positiva
La investigación apoya enfoques de disciplina positiva que reemplazan el castigo con consecuencias lógicas, diálogo y autorregulación. Esta línea sigue los trabajos de Baumrind y otros sobre estilos de crianza: el estilo autoritativo (calidez + límites) favorece mejores resultados frente al autoritario (castigo) o permisivo.
Recomendaciones para familias y centros
- Formar a madres, padres y docentes en estrategias de disciplina positiva: refuerzo de conductas, comunicación clara, consecuencias coherentes.
- Crear entornos escolares seguros emocionalmente; la salud mental es parte del derecho a aprender.
- Integrar programas de apoyo emocional dentro de la escuela (tutoría, mediación, grupos de pares) para que los niños puedan hablar de sus experiencias.
Recursos y metodologías complementarias
- Ending corporal punishment in schools: a guide for teachers, UNESCO / UNICEF.
- Positive discipline in everyday teaching, UNICEF.
- Positive discipline in everyday teaching, UNICEF.
- Estrategia de la Unión Europea sobre los derechos del niño (2021-2024), Comisión Europea.
- Guía de parentalidad positiva, Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 (España).
