Muchos padres y madres se preguntan cuándo empiezan los bebés a encajar piezas, especialmente cuando ven ese salto en el desarrollo tan grande que se da en torno al año de vida (su peque ya mete objetos en cajas o intenta apilar bloques).
Aunque algunos bebés lo hacen antes, alrededor de los 14 meses es cuando muchos niños comienzan a dominar esta acción, gracias al desarrollo de la coordinación y la motricidad fina. Pero detrás de este gesto aparentemente simple hay todo un proceso madurativo, por lo que no todos alcanzan al mismo tiempo sino que es algo que estará muy relacionado con todo el desarrollo anterior.
No se trata solo de que el bebé «lo logre», sino de entender qué habilidades necesita desarrollar antes de poder hacerlo bien. Si no, puedes preocuparte innecesariamente y exigirle algo para lo que, sencillamente, no está preparado. Porque antes de encajar un triángulo en su hueco, el peque debe ser capaz de reconocer formas, controlar sus manos con precisión, coordinar la vista con el movimiento… y también tener un poco de paciencia y constancia. Vamos por partes.
Características del desarrollo entre los 12 y 18 meses
Entre el primer y segundo año de vida, los bebés viven un verdadero salto en su desarrollo cognitivo y motor, especialmente en el primer semestre, que suele sorprender a los papis primerizos. Entre otras muchas cosas, es en este periodo que la mayoría de niños empieza a mostrar interés por juegos de clasificación, encaje y manipulación más precisa.
Durante esta etapa:
- La motricidad fina se refina. Ya no solo golpean o sueltan objetos, sino que intentan colocarlos en lugares concretos.
- La coordinación ojo-mano mejora. Siguen con la mirada lo que hacen sus manos y son capaces de corregir la dirección.
- Aparece el pensamiento causa-efecto. Entienden que si colocan la pieza correctamente, “encaja”.
- Comienzan a resolver problemas de forma experimental. Prueban, giran, vuelven a intentar y repiten hasta la saciedad.
Aunque no todos lo hacen igual ni al mismo tiempo, estas son las bases sobre las que, poco a poco, van logrando encajar piezas.

¿Cómo saber si tu bebé está listo para encajar piezas?
No todos los niños muestran interés por los juegos de encaje al mismo tiempo. Aun así, a los 14 meses muchos ya exploran con piezas grandes o intentan meter formas en huecos similares, aunque necesiten varios intentos.
Señales que indican que tu peque está en el camino:
- Mete objetos en recipientes y los saca con facilidad.
- Manipula con intención sus juguetes, no solo para chuparlos o agitarlos.
- Se mantiene concentrado más de 20-30 segundos en una misma tarea.
- Intenta repetir una acción varias veces para conseguir un resultado.
Si tu bebé aún no lo hace, no te preocupes. Cada niño tiene su ritmo, y el hecho de no encajar piezas a los 14 meses no significa que haya un retraso. Puede que necesite más tiempo para integrar otras habilidades primero. Y si ya hace lo que acabamos de ver, es cuestión de días que dé el siguiente paso.
¿Por qué es importante que el bebé aprenda a encajar piezas?
Encajar piezas no es solo un juego: es uno de los primeros pasos hacia un pensamiento más estructurado y una muy buena práctica para mejorar la psicomotricidad. Es una actividad que, sin que lo sepas, estimula múltiples áreas del desarrollo infantil.
Beneficios del juego de encajar:
- Estimula la motricidad fina: los movimientos pequeños de manos y dedos se entrenan con precisión.
- Potencia la coordinación ojo-mano: esencial para tareas futuras como escribir o abotonarse.
- Activa el pensamiento lógico: el niño prueba, falla, y busca otra manera de conseguirlo.
- Favorece la concentración y la persistencia: habilidades claves para cualquier aprendizaje futuro.
- Refuerza su autoestima: encajar correctamente una pieza les da una enorme sensación de logro.
¿Qué pasa si mi bebé de 14 meses no encaja piezas?
Es muy común preocuparse si nuestro peque no hace lo que otros ya hacen. Pero lo más importante es mirar al conjunto del desarrollo, no a un solo hito. Algunos niños se enfocan primero en caminar, otros en hablar, y otros en manipular.
👉 ¿Tu bebé explora, juega con objetos, los lanza o intenta meterlos en cajas?
👉 ¿Muestra curiosidad por apilar, abrir, cerrar o encajar cosas?
Si la respuesta es sí, lo más probable es que esté en el camino correcto. Solo necesita tiempo, práctica… y un entorno que se lo permita. Si en cambio notas que no usa bien las manos, no fija la mirada o no muestra interés por manipular, conviene comentarlo con el pediatra o con un orientador del desarrollo infantil.
Juegos recomendados para bebés de 14 meses que quieren encajar
La clave es ofrecer materiales seguros, grandes y sencillos. No hace falta que todo sea comprado: muchos de los mejores juegos pueden hacerse en casa.
Ideas para estimular el encaje:
- Juegos de formas grandes con huecos simples.
- Meter tapones de colores en una caja con agujeros.

- Poner aros en un palo (como los clásicos juegos de anillos).
- Encajar cubos dentro de otros (juego de vasos o tazas apilables).
- Jugar a abrir y cerrar tapas o botes de plástico grandes.
Siempre es mejor acompañarlo, mostrarle cómo se hace y dejar que explore sin frustrarse. No lo corrijas constantemente ni le digas que lo hace mal: su aprendizaje está en el proceso, no en el resultado inmediato.